Marcha de Monterrey y el PAN. Odio y polarización.

Ningun mexicano puede negar que el 2006 marcó un antes y después en la historia de México, y una de los grandes lastres que cargaremos por mucho tiempo será el Odio y la Polarización que el Partido Acción Nacional utilizó como campaña electoral.

A 5 años la estrategia siguie repitiendose, el día de hoy se llevó a cabo una marcha por la PAZ en la Ciudad de Monterrey por los recientes y lamentables acontecimientos del Casino Royale donde perdieron la vida 52 seres humanos. La mayoría de las convocatorias se hicieron por medio de las redes sociales, partícularmente Facebook y Twitter.

Desde el inicio la cosa pintaba manipulada, me consta que algunos de quienes convocaban por Twitter avisaban que se debería de ir a pedir la renuncia del Gobernador, todos ellos identificados plenamente con el PAN. Mas aún, un diputado de Acción Nacional pedía en su página de Facebook a la gente que no se confundieran que la marcha era pare pedir la renuncia del Gobernador cito textualmente: "Hay intentos por desviar el interés del plantón de mañana. Es para pedir la renuncia de Medina, no es para otra cosa, no se intente engañar a nadie", manipulando un deseo de paz y azuzando el odio.

Platiqué con una  líder social sampetrina y organizadora del evento por twitter y le pedí que no se manipularan las cosas, que era riesgoso, y me aseguró que no era el caso, que se buscaba la paz pero posteaba " Grita NL #fueramedina #mtydicehastaaqui ".

Entre los oradores algunos panistas queriendo queriendo lucirse y al final.. un desorden, a quien pretendió protestar contra Calderón le quitaron las mantas y les agredieron, a los que hablaban con mesura, los interrumpia una orda gritando fuerte contra el gobernador, y llegaron a la puerta del Palacio de Gobierno y la patearon y aseguraban que iban a entrar, todo en una actitud incendiaria, peligrosa, muy peligrosa.

Esto es lo que logran los panistas, lucran con el dolor y lo vuelcan en odio y polarización, la paz no les importa, les importa solo la raja politica, aunque se lleven de encuentro a una sociedad lastimada.